La verdad es que no sé cómo empezar. Al principio de todo, casi, bueno, sin casi, te tenía un asco increíble, me parecías imbécil, un poco más que ahora. 8]En cambio, ahora, me sigues pareciendo imbécil, pero te quiero, sí. En poco tiempo me has demostrado mucho, me has hecho reír cuando parecía imposible con tus locuras y tus monólogos esos que me haces y no me entero de nada... Gracias de corazón, por escucharme cuando estoy más gilipollas, por seguirme las locuras y reír mis gracias, por regalarme a Vegetal, nuestro bebé obeso, y por decirme que me quieres cada medio segundo. Aunque pienses que yo a ti no y que te cambio, sabes que no es así, que TE QUIERO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario